Aférrate a la línea orgánica de la vida

Nuestra condición personal dispone de muchas formas para alcanzar esos modelos lineales que llamamos objetivos, hay quienes destinan su energía a través de la influencia del arquetipo masculino, aquel que aleja al individuo de su esencia interna, para otorgarle por medio del ego una condición netamente mental de su propia humanidad. Esto nos convierte en entidades insignificantes donde el impacto de nuestra vida se percibe en lo que logramos cuantificar de forma material. Esto, no es algo nuevo, la consciencia colectiva del planeta ha tenido varias transformaciones por la influencia de muchos arquetipos, sin embargo, este último ha sido el que desdibujo en los seres humanos esa noción intangible de su naturaleza.

Es momento de encaminar nuevos estilos de vida, esto lo requiere la humanidad, la que padece de incomprensibles síntomas emocionales que derivan de este modo insostenible de funcionamiento, hemos dado diferentes formas conceptuales a la angustia y la pérdida de confianza en lo que realmente somos. Porque es así, somos más que una personalidad, más que una profesión, más que un intelecto, más que un cuerpo. Justamente esto es lo que ha llevado a muchas personas a encaminar su proceso, somos el resultado del choque constante de ese gran peso en la balanza de nuestro planeta, queremos equilibrar la consciencia colectiva, queremos recuperar la confianza de muchas personas en sí mismas, eso que hoy mantiene en tanta frustración a la sociedad.

Agradecemos cada esfuerzo, cada intención que busca darle mayor peso a ese arquetipo positivo, solo la constancia puede dar posibilidad a nuestra energía para equilibrarse, arremeter contra las emociones negativas solo permite fortalecer la condición que las ha generado. Por esto, es necesario que nos aferremos a lo intangible, a esa vibración que permite que en tu mente surjan millones de pensamientos, esas ondas y cuerdas cuánticas que estan en todo y mantienen en constante movimiento cada parte de la naturaleza; es momento de aferrarnos a la línea orgánica de la vida, la fluidez de la energía solo se encuentra cuando entendemos que disponemos del todo para moldear cada detalle de nuestra vida.

Somos eternos generadores de conciencia, que decidieron prescindir de su claridad para fortalecer y acompañar a madre tierra en su proceso.

A cambio tenemos el honor y la responsabilidad de una existencia en la tierra, el más simple pero perfecto de los modelos, así que recarga tu valor y percibe tu fuerza interna para darle transformación a esos arquetipos que llamamos problemas, dificultades y crisis; es momento de ver las oportunidades, de elevar nuestra verdadera capacidad, esa que ha logrado dar forma a nuestro complejo natural. Es momento de entender que eso a lo que tanto le queremos dar respuesta, aquello en lo que no dejamos de pensar; simplemente no esta buscando ser explicado o solucionado, simplemente busca ser percibido y experimentado.